Manos atadas sin salida,
confusiَn completa me invade;
dolor que arraza mi vida
pena que, no logro pare.
Pies atados a una pared,
una vida muerta me consume;
no entiendo por qué el sufrimiento no avanza
y se queda aterrلndome cada noche.
Pensamientos que no paran de gritarle
a una persona que no merece mi cariٌo
y que sigo amando sin rencores
a pesar de lo mucho que me hizo.
Recuerdos que en la obscuridad me llaman
para que los ahogue con pesadillas de dolor;
de este infierno no encuentro una salida
maldigo la tortura de este amor.
Sَlo entiendo que soy inmune al dolor
cuando cerca de ti estoy, corazَn.